Es en verano cuando las manchas ya presentes en nuestra piel se oscurecen y debemos protegernos a diario para evitar que empeoren, además de para prevenir la aparición de nuevas manchas. Por tanto, el fotoprotector es el tratamiento básico e imprescindible en esta estación del año. Y además ahora tenéis a vuestro alcance tratamientos que neutralizan rojeces y corrigen el tono, que junto con el fotoprotector y el exfoliante os ayudarán a evitar las manchas de forma más eficaz.
Si os preocupan las manchas en la piel os propongo un trío perfecto para utilizar en vuestro ritual de cuidado cotidiano este verano, que además aportará mucha luminosidad al rostro.
Está demostrado que para más de la mitad de las mujeres, una piel bonita está indiscutiblemente ligada a la luminosidad, porque es un reflejo de juventud, bienestar y salud. Y en muchos casos, se considera más determinante una piel lisa y sin manchas, que algunas arruguitas… Lo mismo sucede con las manos, como vimos en post anteriores.
Paso 1: sobre la piel limpia y seca aplicaremos unas gotas en rostro, cuello y escote del sérum Luminescence.
Antes de explicaros cómo funciona este sérum, me gustaría hablar un poco de cómo difunde la luz en nuestra piel y por qué es diferente en cada persona y tipo de piel.
* Cromóforo: Se dice del agrupamiento químico causante de la coloración de una sustancia (definición extraída de la R.A.E)
Como vemos en esta imagen, el estado de nuestra piel, las rojeces, las manchas, etc, van a determinar el tono y la luz que difunde, y en definitiva el aspecto y luminosidad que observamos en cada persona en particular. La edad, los rayos UV o el modo de vida (tabaco, estrés, falta de sueño, alimentación desequilibrada…), pueden producir modificaciones profundas, a menudo visibles en superficie, de la estructura y la calidad de la piel, y alterar su luminosidad.
La función del sérum Luminescence corrector del tono es actuar en profundidad y en superfície para reducir visiblemente las imperfecciones cutáneas como manchas pigmentarias, rojeces y poros dilatados, para devolver a la piel su luminosidad original. El CHROMO-COMPLEX, asocia tres extractos de plantas antioxidantes que limitan el estrés oxidativo y los fenómenos inflamatorios para reequilibrar los tres cromóforos de la piel; melanina, capilares sanguíneos y colágeno, tanto en calidad y cantidad, como en distribución. Por lo que también tiene una acción anti-manchas que lo hace un tratamiento completo para evitarlas en verano, como venimos diciendo a lo largo del post. Además, en superfície, gracias a la acción de sus pigmentos correctores ópticos aporta luz al rostro instantáneamente, sin efecto brillante. Los nácares oro difunden una luz ámbar. Los nácares rosáceos difunden una luz rosácea. Los nácares azules difunden una luz azulada. Dando lugar así, a luz perfecta.
Paso 2: después del sérum podemos aplicar una crema hidratante y el fotoprotector, o éste directamente.
El protector solar perfecto para evitar las manchas y formar parte de este trío de tratamientos, es el Photoderm Láser de Bioderma:
Este fotoprotector es específico para zonas hiperpigmentadas, pieles tratadas con láser y pieles con cicatrices. Photoderm Láser garantiza una protección homogénea y constante contra los UVA y los UVB, con una acción “anti-UVA extrema” que lucha contra el envejecimiento cutáneo prematuro y previene las intolerancias solares. Su eficacia anti-UVB protege con total seguridad de las quemaduras solares y, por consiguiente, de los peligros potenciales que su repetición provoca a largo plazo. Y también contiene un complejo patentado BIOprotection® Celular que protege al ADN de los efectos nocivos de los UV. Además también contiene ingredientes específicos que minimizan el riesgo de pigmentación y suavizan la piel debilitada.
Su textura no es grasa, pero al tratarse de una pantalla total sí es un poco espesa. Aunque se extiende bien, y si realmente os preocupa el tema de las manchas más vale prevenir que curar. Otra alternativa es utilizar este fotoprotector a nivel de la mancha localizada y reaplicarlo cada dos horas y para el resto del rostro, utilizar alguno tipo el ultra-fluido de Bioderma, de textura mucho más ligera. Pero si tenéis tendencia a pigmentaros, utilizando el Photoderm Láser por toda la cara, cuello y escote, evitaréis la aparición de nuevas manchas solares.
Paso 3: la exfoliación es la base de este trío anti-manchas.
Una vez a la semana debemos exfoliar la piel, es el mejor tratamiento para renovarla, evitar la acumulación de melanina y eliminar células muertas. Por eso os recomiendo un exfoliante suave como el de Apivita de albaricoque para no irritar la piel. Ayudaremos también a mantenerla limpia y más luminosa, eliminando impurezas e imperfecciones.
Y como no podía ser de otra manera, no todos los exfoliantes son iguales, y los tratamientos escogidos para este trío de verano anti-manchas están seleccionados siempre por algún motivo. Este exfoliante tiene una acción anti-manchas porque además es antioxidante. En su fórmula se ha sustituido el agua por infusión de té verde, lo que ayuda a contrarrestar los efectos de la radiación UV. Y está libre de parabenos, siliconas y propilenglicol.
Os aconsejo que en el caso de una piel mixta, lo utilicéis incluso un par de veces por semana, siempre sobre la piel húmeda realizando un suave masaje circular, y retirarlo con agua tibia.
